Introducción
Un tema muy común, por el que me preguntan los pacientes es por las agujetas. Debo decir que no hay muchas publicaciones de artículos científicos en páginas como pubmed, ya que no se consideran una lesión mayor, pero pueden llegar a ser muy incapacitantes.
Se pueden definir como dolores o punzadas que se sienten en el cuerpo, especialmente en las extremidades, después de efectuar ejercicios violentos, continuados o de extraordinaria energía. Son más habituales en deportistas ocasionales, aunque los profesionales también suelen padecerlas.
Se caracterizan por dolor y pérdida de la fuerza muscular. Si no se tratan adecuadamente, pueden influenciar en el rendimiento del deportista y derivar en otro tipo de patologías.
Etiología de las agujetas
Están provocadas por:
Realizar esfuerzos físicos para los que el cuerpo no está preparado.
En los profesionales, tras cambios de entrenador, de programa de ejercicios.
Debido a una mala hidratación.
Debido a un abuso o mala ejecución en la realización de los estiramientos.
Teorías del mecanismo fisiológico productor de las agujetas.
Las principales teorías son las siguientes:
Acúmulo excesivo de ácido láctico.
Exceso de tono muscular con disminución de la demanda de oxígeno en el músculo.
Exceso de calor local en el músculo.
Acumulación de sustancias nocivas como bradiquimina, serotonina …
Microlesiones musculares, esta teoría hoy en día es muy aceptada. Debido a esfuerzos intensos o bien prolongados en un músculo poco entrenado o mal entrenado, habría una serie de fibras musculares atrofiadas o menos resistentes que se romperían. Al romperse estas células, vierten al musculo iones de calcio y potasio que resultan irritantes y se produce una inflamación y el característico dolor.
Etc.
Tratamiento
El mejor tratamiento posible para las agujetas es la prevención. Por ello te recomiendo:
Entrenar correctamente y no trabajar más allá de las posibilidades físicas de cada uno.
Hidratación correcta.
Alimentación adecuada.
También se puede combatir con estiramientos suaves, masajes y la realización del mismo ejercicio que ha provocado las agujetas, pero con menor intensidad. Esto último aumenta el riego sanguíneo en la zona afectada, reduciendo los metabolitos y reduciendo en cierto grado el dolor.
Referencias bibliográficas
De la Peña A. “16 acciones para prevenir y tratar las agujetas”. Enfermería.io. Enfermería Deportiva, 22 de enero de 2019.
Verdades y mitos sobre las agujeras. Clínica fisioterapia-rehabilitación. http://www.fisioterapia-rehabilitacion.com/Articulos/11.pdf
Körner, Z. (2017). Congenital muscular dystrophy with laminin 2 chain-deficiency. Initiation of disease and development of treatment. 2017.
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